Como buen cítrico, el pomelo es una fruta con alto contenido en vitamina C y ácido fólico. Su riqueza en minerales como el potasio y el magnesio se traduce en propiedades tonificantes y antioxidantes. El zumo de dos pomelos cubre el 100% de la dosis diaria recomendada de vitamina C y es un excelente depurativo en ayunas. Su sabor ácido se puede atenuar mezclándolo con zumo de naranja y/o limón. Los pomelos pueden conservarse en perfecto estado durante una o dos semanas a temperatura ambiente.