Adecuado para estofados y guisos, el rabo de vacuno es una carne muy melosa que pese a formar parte de la cocina tradicional española es cada vez más reconocida en los platos de vanguardia. Se trata de una pieza con un sabor muy característico. Es perfecta para guisar porque al ser un poco gelatinosa aporta una textura inconfundible.